Con motivo de la Semana de la Arquitectura, en colaboración con el Colegio de Arquitectos de Málaga, Mahatma LILIPUT y Cooking Málaga estuvimos éste sábado día 12 de octubre en la calle Alcazabilla, que se transformó en una alegre y colorida ciudad comestible diseñada por nuestros niños y niñas. Utilizando materiales de construcción deliciosos: bizcochos, galletas, chucherías de todos los tamaños y colores, nos regalaron una ciudad pensada para el futuro, con muchas zonas verdes y transportes sostenibles. El resultado fue espectacular. ¡Todos querríamos vivir en una ciudad así!
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